Koh Phi Phi es el famoso escenario de la película “La Playa”, una de las islas más paradisíacas de Tailandia. ¿Vienes a ver este rincón del reino de Siam?
Las maravillosas Koh Phi Phi (เกาะพีพี), son por mayoría absoluta el paraje más preciso y deseado de todo el país. Con sus playas de arena blanca, aguas azul turquesa, y su selva que crece encima de acantilados que desafían la gravedad sobre el mar, este rincón de la nación es el objetivo y destino final de todo viajero que pisa suelo tailandés, lo más cerca del cielo que uno puede estar en vida. Estas 2 islas, la grande Koh Phi Phi Don, y la más pequeña Koh Phi Phi Lee, son parte de un parque nacional con estrictas normas que protegen la zona, aunque a veces son olvidadas por los policías locales en favor de los intereses turísticos.
Están localizadas en el mar de Andamán al este de Phuket y al oeste de Krabi, y antiguamente sola estaban habitadas por pescadores musulmanes, que las hacían servir de punto de parada entre trayectos. A principios de los 90, este sitio empezó a hacerse popular, y las masas de turistas empezaron a llegar, mientras los habitantes construían a toda prisa alojamientos a bien de precio. Pero la fiebre por ganar dinero se apoderó de ellos, y se fueron cambiando los económicos bungalows playeros por resorts de lujo.
Koh Phi Phi Don
Esta es la más grande de las 2 islas principales y la única con habitantes, sitio de llegada de los turistas donde se hospedan, ya que aquí están todos los hoteles, tiendas, restaurantes y bares. Su estrecho centro, que parece conectar 2 islas entre sí, separa las 2 playas principales a menos de 10 minutos andando, concediendo a la isla una forma de letra “H” con una de las puntas más largas.
Sus animadas fiestas de la playa, con actuaciones de fuego donde bailar hasta que salga el sol, completan la actividad de ocio en la isla, ofreciendo todo lo que necesita uno para pasar en grande su estada insular. Después del terrible tsunami del 2004 que arrasó el sitio, ahora ya no queda ni rastro del desastre, excepto unos carteles indicativos de las rutas a seguir en caso de padecer otra catástrofe de este tipo.
Koh Phi Phi Lee
Famosa por contener el plató de la película “La playa“, esta isla totalmente deshabitada es la verdadera joya del archipiélago. Un auténtico espacio natural del que disfrutar, previo pago de 25 baths por persona al entrar a la isla. Una guarda controla la conocida playa de Maya bay, y se asegura que todo el mundo ha abandonado el islote antes de que caiga el sol, ya que esta prohibido emular los protagonistas de La playa quedándose a dormir en ella, pero como siempre pagando se obtiene un permiso especial para pasar la noche allí.
La mejor forma de llegar a ella, es negociar precios con los barqueros que faenan en las playas de Koh Phi Phi Don, y después de un duelo de regateo se acuerda precio y la hora de salida para el día siguiente.
Como llegar
La única forma de llegar a las isla es utilizando los ferrys que salen diariamente desde Phuket, Krabi, Rai Ley, y Ao Nang. Se pueden obtener billetes de ida o ida y vuelta, en las diferentes agencias de viajes fácilmente localizables desde cada punto de partida.
Otras islas que visitar
Koh Yung – Literalmente isla mosquito, es un lugar deshabitado formada por acantilados y una solitaria playa donde tumbarse a pensar que se esta en uno de los puntos más remotos del mundo. Koh Pai – La isla bambú, es una alternativa a las isla principales, un sitio especial para descubrir donde donde bañarse y degustar pescado y marisco recién pescado en su único restaurante.
Alojamiento
Solo es posible alojarse en una de las 2 islas, y aunque las noche en el paraíso se pagan más caras que en la tierra firme, la variedad de precios es bastante amplia. Se puede dormir desde bungalows en la playa por unos 500 THB, hasta pasar una noche de bodas en la suite de un resort de 5 estrellas.
La mayoría de las opciones se encuentra en la orilla del mar, pero si se desea el precio más económico es preciso buscar en las cabañas más alejada de la arena. Los ganchos que merodean en busca de turistas sin hotel son abundantes, por eso es preciso no acordar nada con ellos, si no se ha visto antes la habitación o hacer la reserva online.