El templo de Doi Suthep, anclado en la montaña de Chiang Mai, es uno de los puntos más destacados del norte de Tailandia. ¡No te lo puedes perder!
Ninguna visita a Chiang Mai está completa sin ver el Wat Phra Doi Suthep. Un espectacular templo budista en la montaña de Doi Suthep que se puede ver desde cualquier punto de la ciudad, siempre que no nos lo tape ningún edificio. El monte del Doi Suthep, es un lugar sagrado y respetado por los tailandeses desde hace más de 1200 años, ya que sus antepasados creían que las almas de los difuntos residían en él, convirtiendo esta colina en el epicentro del budismo por el imperio Lanna.
Hoy en día es uno de los puntos más turísticos de la ciudad de Chiang Mai y Tailandia en general, atrayendo a muchos peregrinos y turistas, tanto locales como internacionales. Descubre tu también el lugar con las visitas guiadas de Get Your Guide, una manera única de conocer en persona este famoso templo.
Un poco de historia del templo Doi Suthep
El templo fue construido a finales del siglo 14 bajo el mandato del rey Geu Na. La leyenda cuenta que el sitio del templo fue elegido de una manera bastante inusual. El rey Geu Na ordenó que ataran a un elefante sagrado de color blanco, una reliquia sagrada de Buda y que se dejara andar el animal en libertad por el monte.
Tras un tiempo, el elefante tuvo un accidente mientras intentaba llegar a la cumbre del monte y justo en el sitio donde la bestia falleció, se construyó el Wat Phrathat Doi Suthep.
El rey ordenó que una pagoda dorada se construya dónde estaba el elefante y que la reliquia de Buda que llevaba encima fuera alojada en el mismo templo que se construiría alrededor de la sagrada pagoda. Justo en la entrada del santuario hay una figura blanca en forma de elefante, que conmemora al sagrado animal que allí murió. Más tarde, durante el reinado del rey Phra Muang Ketklao en 1552, la estructura fue aumentada y modificada hasta su estado actual.
Ubicación del templo en la montaña de Chiang Mai
El templo Doi Suthep se encuentra a unos 15 kilómetros tras una carretera de curvas montaña arriba de la ciudad, a 1053 metros sobre el nivel del mar y desde allí en los días destapados hay unas espectaculares vistas de todo Chiang Mai. Desde la entrada situada a pie de carretera hay una larga escalera de 306 peldaños custodiada por una barandilla en forma de Nagas (Serpientes mitológicas) que llevan hacia el templo.
Para los que no estén en forma o no tengan ganas de subirlas, también hay un ascensor que cuesta unos 30 baths, pero la mayoría de los viajeros optan por subir andando. Estas famosas escaleras, que aparecen en cualquier guía de viajes sobre Chiang Mai, están llenas siempre de niños vestidos de forma tradicional pidiendo limosna, además de las madres que venden cualquier tipo de recuerdo.
Una vez superadas las largas escaleras, la grandeza del Doi Suthep nos recompensa con un idílico santuario formado de una cubierta principal, compuesta de varios pabellones con tajados rojos que incluyen un museo, una tienda de recuerdos, un templo de madera, la estatua del elefante blanco, 2 torres con una campana y el mirador.
En esta primera cubierta hay los accesos a la segunda y más importante, donde está la gran pagoda dorada rodeada de claustros con imágenes de buda y pinturas en forma de mural que cubren las paredes, además de puntos para rezar y 2 templos cubiertos por varios tejados al estilo Lanna donde los monjes hacen sus plegarias habituales y los tailandeses reciben sus bendiciones.
La subida hasta Doi Suthep
Durante la construcción de la carretera hasta el templo del Doi Suthep el monje que bendecía las obras, hizo 3 templos por el camino que servían como puntos de parada y descanso para los trabajadores, donde los mismos comían y dormían, además de ser bendecidos para prevenir los accidentes laborales.
Al inicio de la carretera, antes de empezar a subir la montaña, hay una estatua a mano izquierda en recuerdo a este monje, donde muchos tailandeses paran a ofrecerle flores y dedicarle plegarias por haber impulsado la creación de la calzada que llega al famoso templo de Chiang Mai. Siguiendo el asfalto encontraremos la entrada al templo Wat Sisoda, que a diferencia de los otros 2, el Wat Sakithakha y wat Anakha, es el único que ha sobrevivido a terremotos y otros desastres.
Antes de la construcción de la carretera asfaltada, los peregrinos subían al Doi Suthep andando por un empinado sendero que todavía hoy utilizan algunos tailandeses. Este camino de tierra y piedras que cruza la vegetación de la montaña, empieza detrás de la Universidad de Chiang Mai y llega hasta una joya de templo escondida entre la naturaleza y que pasa desapercibido entre los viajeros que se llama Wat Pha Lat.
A partir del Wat Pha Lat, el sendero continúa hasta llegar a la entrada del templo Wat Phra Doi Suthep, lugar donde empiezan las famosas escaleras de 306 peldaños.